Cloud computing

Cloud Computing

Es evidente que el cloud será en el futuro inmediato una de las principales tecnologías, y que por tanto, será adoptado de una forma general por gran parte de las organizaciones empresariales, para poder evolucionar sus plataformas tecnológicas de una forma ordenada y sobre todo acorde a sus necesidades cada vez más cambiantes, dado que sus características lo hacen invaluable para resolver algunos de los dilemas de más difícil solución, a los que actualmente todas se enfrentan de una forma cotidiana.

Mucho se ha hablado acerca del cloud, y desde sus inicios ha sido llamado a proclamarse como la solución a casi todos los problemas actuales para la provisión de servicios e incluso de infraestructura, pero, ¿es esto realmente cierto?, ¿es el cloud actualmente la solución a todos los problemas?, intentaremos dar una respuesta a continuación.
 

Nuestra intención no es más que informar y asesorar lo más realistamente posible sobre lo que es y nos puede proporcionar el cloud, pero de una forma razonada y sobre todo contrastada, con la esperanza de que este análisis sirva de referencia a todas aquellas empresas que estén considerando implantar servicios de cloud.

En términos simples ¿qué es Cloud?

Adicionalmente a lo expuesto arriba, para que una solución sea llamada Cloud no solo debe ser facturada como servicio (bajo alguna modalidad de alquiler) y ser expansible dinámicamente, también deberá ofrecer redundancia y capacidades de tolerancia a fallos, y por último, se debe tener en cuenta como una característica tecnológica, que actualmente todos los cloud están basados en virtualización.

Para qué sirve un Cloud:

Las aplicaciones son muy variadas o más bien casi ilimitadas, pero en líneas generales se revelan muy adecuados para provisionar aplicaciones y servicios generales para las plataformas de aplicativos que de otro modo deberían ser alojados en una infraestructura propietaria.

En nuestra opinión, como se verá a continuación, el cloud actualmente no puede sustituir de una forma general a las soluciones propietarias, pero si le dan al cliente una posibilidad más de elección cuando concurren ciertas circunstancias, como serían los casos de aplicaciones de alta demanda de usuarios, en la que a través del cloud se nos permitirá dinámicamente ampliar sus recursos en las horas pico y disminuirlos en las horas valle o de bajo tráfico, ajustando a la vez los costos de explotación de forma proporcional a la demanda que se tenga.

¿Es Cloud la solución a todos los problemas de implantación y gestión de la infraestructura?

Debido a sus virtudes, el cloud se ha “vendido” a menudo como la solución a todos los problemas actuales para la implementación de infraestructuras y servicios, si bien es cierto, que puede simplificar muchas cosas en determinados entornos tanto a los usuarios finales como sobre todo a los implementadores, no es la solución a cualquiera de los problemas, y sobre todo o más exactamente, no es lo adecuado o todos los todos los problemas que surgen habitualmente.

Es evidente, que existen muchas falsas creencias en cuando a los servicios de cloud o detalles que públicamente son desconocidos y que a veces incluso se intuye que son más o menos ocultados de una forma deliberada.

Mitos y Realidades

Cloud es a prueba de fallos: Falso, las actuales estadísticas demuestran que hasta los grandes nombres en la industria del Cloud, sirva como ejemplo AWS - Amazon, que siendo probablemente el mayor proveedor a nivel mundial de servicios de cloud, ha sufrido distintos periodos de inactividad de incluso varias horas tanto en el trascurso del año 2009 como en el 2010, y en los que fueron afectaron el 90% de sus servicios disponibles.

La práctica totalidad de los proveedores actuales de cloud, han experimentado (y aun experimentan) “algunos” períodos de downtime, y puede que esto probablemente sea debido al hecho de que aún es una tecnología muy nueva y aún requiere de algún tiempo para madurar, o quizás al simple hecho de que nada es totalmente a prueba de fallos.

Es cierto, que es de esperar que la fiabilidad general de los sistemas de cloud irá incrementándose de forma paulatina conforme evolucione los propios sistemas que lo componen, pero ello no implica que no debamos considerar la posibilidad de sufrir un corte “prolongado” del servicio del cloud y por tanto creemos que esto deberá considerarse como una de las principales premisas a evaluar, sobre todo en los entornos empresariales o más críticos.

Adicionalmente a lo comentado, debe tenerse en cuenta que en el cloud siempre tendremos un “cordón umbilical” que nos unirá al mismo, que son las líneas de comunicaciones, y también es de esperar que existan fallos en las mismas de forma más o menos reincidente, un inconveniente, que no siempre es salvable y que en cualquier caso requerirá de hacer inversiones para redundancia sobre las líneas de comunicaciones, que no son especialmente de bajo coste.

En cualquier caso consideramos imprescindible prever siempre los mecanismos de “failover” adecuados, mediante los recursos locales o la redundancia de proveedores, que nos puedan garantizar la continuidad del servicio aun sin la disponibilidad del cloud.

Cloud puede ser expandido ilimitadamente: Falso, una máquina virtual solo podrá ser tan potente como el servidor físico en donde se ejecute menos los recursos que necesite el sistema operativo y el propio software de gestión del cloud, por ejemplo si el proveedor utiliza servidores DUAL XEON 5520 como plataforma base de cloud, el nodo más potente solo podrá tener la misma potencia de un servidor Dual Xeon 5520 menos aproximadamente un 10% de recursos, que es lo que requiere el propio sistema de cloud y el sistema operativo, normalmente la expansión más allá de un único nodo se logra balanceando la cargas entre múltiples máquinas virtuales. Todo tiene límites.

Puedo tener ilimitadas máquinas virtuales o recursos bajo cloud: Teóricamente sería posible, pero la realidad es que esto siempre estará sujeto a la capacidad real que tenga el proveedor en el momento determinado de la petición, por ejemplo, si hemos contratado 10 máquinas virtuales en el cloud y en un momento determinado queremos expandir a 50 máquinas virtuales, o aumentar las prestaciones de una máquina virtual en un orden de 10 veces, probablemente ningún proveedor actual tenga la capacidad instalada suficiente para satisfacer esa demanda de pico de una forma rápida y menos aun inmediata. Aún en cloud, sigue siendo necesario prever cuidadosamente antes de implementar.

Cloud es más barato que la misma solución propietaria: Falso, Actualmente el cloud requiere de una costosa infraestructura en los datacenter de los proveedores, lo cual requiere a menudo de desembolsos muchas veces espectaculares por parte de estos y ello condiciona irremediablemente los costos que finalmente trasladan a sus clientes. Adicionalmente, el proveedor siempre deberá dejar una parte de su infraestructura “sin uso” (habitualmente un porcentaje bastante elevado del global disponible y como hemos dicho de un equipamiento muy caro) para que los clientes puedan expandir sus sistemas de forma dinámica y también para proveer de la necesaria tolerancia a fallos, lo que también repercute negativamente en los costos finales a los usuarios.

Al contrario de la creencia más o menos generalizada que existe sobre sus costos del cloud, hemos observado que actualmente una infraestructura propietaria sigue siendo de media bastante más económica que la disponibilidad de los mismos recursos en cloud, cuando se compara en términos absolutos que incluya el tiempo total de vida de uso de los servicios.

Ventajas

Los cloud presentan muchas ventajas, pero haremos hincapié en las más representativas:

Por diseño son tolerantes a fallos: Los Cloud separan los procesos (cpu y memoria) de los datos (almacenamiento), de esta forma es posible reemplazar un nodo que falla de manera instantánea, en términos simples los datos estarán en los sistemas de almacenamiento SAN y esta será provista a los nodos del cloud que proporcionan la cpu y la memoria, en caso de que el servidor falle, el sistema cloud puede montar rápidamente los datos en otro servidor que tenga recursos disponibles, si el almacenamiento falla, el proveedor tendrá un sistema de almacenamiento secundario, en caso de fallas de red (switches, routers, tarjetas de red, firewall, etc.) el proveedor tendrá un sistema redundante para minimizar las fallas. Aun lo anterior, lo comentado no significa que no puedan producirse caídas del servicio, puesto que las fallas se pueden producir por otros innumerables motivos como son los referidos en la propia configuración y gestión de las máquinas virtuales del cloud, fallos de las propias aplicaciones, colapsos y bugs de los sistemas operativos, etc.

  • Recursos bajo demanda y costes proporcionales a esta: La capacidad de ampliar o disminuir recursos dinámicamente, siendo también los costos generados proporcionales a los recursos demandados.
  • ***Bajo Costo de inicio: Al poder contratar pocos recursos al inicio e ir aumentando a medida que se requieran nos permite que el costo inicial sea bajo, sobre todo en comparación con una infraestructura equivalente propietaria en donde se debe pagar por la adquisición de la totalidad de esta, aunque inicialmente solo se necesaria una pequeña porción de los recursos.

*** Aun cuando la hemos señalado como una ventaja, creemos que siempre deberá realizarse una estimación de inversión, es decir, el costo total de la solución respecto a la duración prevista de los servicios que provea, puesto que la ventaja del bajo costo de inicio de una solución en cloud, se convertirá en clara desventaja a medida que aumenta la duración en el tiempo, dado que una infraestructura propietaria es amortizable, y la amortización del producto suele producirse mucho antes de su final de vida reduciendo así sus costos globales, y en cambio los servicios en cloud no tendrán ese comportamiento, puesto que estos en cualquier caso tendrán unos costos que podrán ser variables pero que persistirán durante toda la vida del servicio.

Desventajas

Los cloud también presentan algunas desventajas muy relevantes, a considerar:

  • Precio a medio largo plazo: Actualmente, si comparamos los mismos recursos en cloud y sus equivalentes en propiedad durante la vida útil de la mayoría de los servicios que actualmente se implementan, el cloud suele ser más costoso, arriba explicamos someramente porque los costos de cloud para servicios a medio-largo plazo, son como norma general más elevados que su equivalente propietarios.
  • Requisitos de conectividad a Internet elevados: Los requisitos de conectividad a Internet para proveer servicios en cloud con agilidad son habitualmente bastante más elevados que en su equivalente propietaria, por lo que deberán ser provistas líneas de mucha más capacidad, y se deberá tener en cuenta que existen muchas “zonas” donde los operadores no nos pueden proporcionar los mínimos necesarios para desplegar con fiabilidad los servicios demandados en cloud, por lo que lo hace una opción inviable en muchos casos. Además líneas de mayor velocidad significan mayores costos.
  • No todo es “cloudable”: Numerosos servicios, o soluciones tecnológicas, no tienen soporte en el cloud, o simplemente no pueden ser adaptadas de una forma óptima a este entorno, puesto que aunque la virtualización dispone de mucha flexibilidad en este aspecto, el cloud tiene diversas limitaciones intrínsecas a su propio diseño generalista, ya que es un servicio dirigido principalmente a un uso general y a menudo habrá que acatar reglas e imposiciones que nos condicionarán la posibilidad de un uso personalizado en cloud para muchos de los servicios que habitualmente se pueden requerir en un entorno empresarial común, lo que casi siempre nos obligará a desarrollar entornos mixtos, donde deberán coexistir las soluciones propietarias junto con lo que nos sea provisto en el cloud.

Conclusiones finales.

Antes de adoptar servicios en cloud, y sobre todo, para aquellos que puedan afectar de algún modo a la operatividad de nuestra empresa, será imprescindible que se realice un estudio pormenorizado en todos sus ámbitos (adecuación tecnológica, integración con la infraestructura existente, costes totales para la vida del servicio, etc.…) previo a la adopción de tecnologías de cloud, para así garantizar la idoneidad y optimo resultado en su adopción a nuestro entorno concreto.

La realidad, es que actualmente el cloud está siendo usado como un complemento concreto a las soluciones propietarias en la práctica totalidad de los clientes, dado que se observa que la generalidad de las empresas donde se han adoptado servicios en cloud con éxito, estos coexisten con las infraestructuras y soluciones propietarias.

En Taemsa, podemos realizar los análisis y desarrollos que se requieran para que la empresa de el salto al Cloud de una forma segura y eficiente.

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